domingo, 7 de octubre de 2012

Uñas de zebra


¡Bye-Bye puntos negros!

Puntos negros, esos puntos que cuando te levantas, te miras en el espejo y piensas "voy a eliminarte" o "¡fuera de mi cara!" que se encuentran en los lugares más recónditos de la nariz y son imposibles de eliminar, o simplemente, no quieren salir a la fuerza. Pues bien, hoy les llegó su hora. Aparte de poder utilizar cosméticos cuyo fin es acabar con los puntos negros, si tan solo tienes de vez en cuando o te ha salido uno con ganas de quedarse, puedes probar suerte con la gelatina. La gelatina tiene que estar en láminas (se encuentran fácilmente en la parte de repostería de los supermercados), se prepara como indique el fabricante, siempre y cuándo se quede con la forma de lámina, diluirla no serviría, puesto que se utiliza a modo de cera fría en tiras que se aplica encima del punto negro. Hay que esperar a que se enfríe encima de la piel y pegar un tirón fuerte para que el punto negro salga. Si quedase algún resto de gelatina, se elimina fácilmente con agua tibia. 


Algo natural y despeinado







Salen un poco borrosas... pero aún así, se distinguen el peinado y el maquillaje.

Uñas sin rastro

Muchas veces al desmaquillarnos las uñas, sin querer, nos dejamos rastro del color que nos las maquillamos a los lados y en la cutícula, y si el color es oscuro o llamativo la uña tiende a quedarse con un poco de pigmento, dejando la uña con mal aspecto, como si estuviera sucia. Una solución, aparte de eliminar nuestra cutícula con los cosméticos y herramientas adecuados, sería utilizar una base de esmalte, con ello conseguiremos que el color que apliquemos tenga más fijación y al quitárnoslo la uña no tenga ese mal aspecto. 


La base de esmalte de uñas no tiene pigmento, por lo que si en alguna ocasión solo queremos darle a las uñas un toque de brillo, la base también nos serviría en caso de no tener un esmalte transparente.